Dos años más tarde, en 1972, se celebró en Estocolmo (Suecia), la primera conferencia encaminada a la protección del medio ambiente y a la sensibilización de los líderes mundiales sobre la importancia de su cuidado. En ese momento se instauró el 22 de abril como el Día Internacional de la Tierra. En este mismo ánimo, cada año se procura desde diversos estamentos tanto públicos como privados, abogar por el uso responsable de los recursos y tomar conciencia sobre el impacto que la actividad humana tiene sobre la Tierra y sus recursos.
Por otro lado, en Colombia, para la promoción del cuidado del medio ambiente no solo se conmemora el Día Internacional de la Tierra, también estableció el 29 de abril como el Día Nacional del Árbol, el cual se conmemoraba inicialmente el 12 de octubre; sin embargo, un decreto del año 1941 estableció que fuera conmemorado el 29 de abril. Este día, también llamado Día Forestal Mundial, fue inicialmente una recomendación del Congreso Forestal Mundial que se celebró en Roma en 1969. Esta recomendación fue aceptada por la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) en 1971 y desde ese día se conmemora o celebra el Día del Árbol en nuestro país.
Estas celebraciones o conmemoraciones son la oportunidad de tomar conciencia acerca de la importancia de los árboles o superficies arbóreas, no solo como generadores de servicios ecosistémicos, sino por su importancia cultural y social, ya que todos y cada uno de los habitantes del territorio nos beneficiamos de manera directa e indirecta de los árboles y todo lo relacionado a ellos, sin mencionar los vínculos que se dan en los ecosistemas, entre ellos y otras especies.